SOBRE NOSOTROS / OBOUT US

---

El Apóstol Fredy Lagos nació en Tegucigalpa, la capital de Honduras bajo una familia humilde y de bajos recursos. Desde niño siempre le gustaba cantar y desde que se entrego al Señor siendo un muchacho joven le gustaba participar en el grupo de alabanza de su iglesia. Después de muchas transiciones el Apóstol Fredy vino al Ministerio Internacional El Rey Jesús e inmediatamente empezó a servir en lo que el más amaba, alabar y adorar al Rey de reyes y Señor de señores. Eventualmente fue promovido como unos de los líderes de alabanza en la iglesia y fue enviado a las diferentes iglesias hijas para ayudar a levantar ese ministerio. Una de esas iglesias estaba en la costa del oeste y por un transcurso de dos años viajaba desde Miami a la costa para servir en lo que fuera necesario. El Apóstol Fredy siempre fue un hombre responsable y leal en todo lo que se le ponía a hacer, nunca creyó en el concepto de “no se puede”. 

Es a causa de esto que actualmente el Apóstol Fredy Lagos, juntamente con su esposa, la Profeta Blanca Lagos, pastorean la iglesia El Rey Jesús Naples en el estado de la Florida, reconocida como una de las iglesias hispanas con mas crecimiento en la cuidad de Naples.  Dios ha llevado al Apóstol Fredy a predicar el evangelio a más de 30 países alrededor del mundo, edificando iglesias locales e internacionales.

El Apóstol Fredy Lagos es un apasionado hombre de Dios usado fuertemente en la revelación de la Palabra, sanidades, milagros y palabra profética. El Apóstol Fredy y la Profeta Blanca Lagos trabajan para cumplir la visión que han recibido de Dios y de su padre espiritual, el Apóstol Guillermo Maldonado de Evangelizar, Afirmar, Discipular y Enviar formando y equipando al pueblo de Dios con fuerte liderazgo capacitándolos para cumplir su llamado y vivir una vida exitosa en Cristo Jesús. 

Profeta Blanca Lagos nació en la ciudad de Guatemala, y vino a vivir a Miami donde conoció a su esposo, Apóstol Fredy Lagos. Desde el 2005 fueron enviados por el Apóstol Guillermo Maldonado a pastorear la iglesia El Rey Jesús en la ciudad de Naples, Florida. Profeta Blanca es una mujer  quien ha consagrado su vida para el servicio a Dios siendo usada poderosamente para la destrucción de fortalezas a través de la intercesión, guerra espiritual, la sanidad interior y la liberación. Es una mujer apasionada por  rescatar al oprimido, al cautivo y restaurar familias para que puedan dejar un legado a sus generaciones.  Hoy en día no solamente pastorea una iglesia local, Dios en ella ha  depositado una gracia para ir a las naciones,  profetizar sobre ellas, transformar mentes, corazones y levantar líderes que puedan ensanchar su territorio. 

Profeta Blanca se deleita en estudiar y escrudiñar la Palabra de Dios y cada día vemos como Dios la esta equipando en Su Reino con Palabra revelada  y  estrategias para manifestar Su gloria. Ella posee una licenciatura en Ministerio de University of the Supernatural Ministry.

EVANGELIZAR

Es aquella etapa del proceso de la visión en la que ganamos almas para Cristo. TODO miembro de la iglesia debe ser un ganador de almas. Nuestro evangelismo es sobrenatural, pues no sólo predicamos la Palabra y testificamos, sino que también manifestamos pruebas del poder de Dios a través de milagros, sanidades, palabras proféticas y de ciencia.

AFIRMAR

Es aquella etapa del proceso de la visión mediante la cual se cimenta, asegura, consolida la decisión del nuevo creyente (NC) y se le da el seguimiento apropiado hasta que desarrolle los fundamentos básicos de su nueva vida en Cristo, para que luego forme parte de un  grupo de di scipulado.

DISCIPULAR

El objetivo de discipular es  enseñar, entrenar, equipar, activar y pastorear ya que se busca el crecimiento constante y continuo de la persona.

ENVIAR

Líderes son enviados dentro de la iglesia local, con el ADN de esa Casa y equipados con el poder y los dones necesarios para extender el Reino de Dios por medio de desarrollar cada una de las tareas que se le encargan. También, a medida que crecen espiritualmente, pueden ser promovidos y enviados como diácono, anciano o ministro, según el llamado que Dios tenga para su vida